martes, 28 de enero de 2014

DE IMPUESTOS Y SU ROL SOCIAL

Por: Félix Miranda Quesada

DE IMPUESTOS Y SU ROL SOCIAL

En reiteradas ocasiones he manifestado en las Redes Sociales que, el problema actual de Costa Rica (en el plano económico-social), no se resuelve con la "imposición" (entiéndase con los impuestos) y, he manifestado contra lo que muchas otras personas opinan que no se requiere de más impuestos inmediatos. En EL Flujo de Caja Nacional (Cash Flow), los orígenes (Estado de Origen y Aplicación de Recursos) se materializarían en 1) Mejor recaudación, 2) Combatiendo y penalizando la evasión, 3) Gravando justa y equilibradamente la economía informal (esto, tal vez, requierA de una explicación aparte. Tal vez el término "gravando" no es el más adecuado, sino el "control sobre la economía informal”).

Por su parte, dentro de este Flujo de Caja (Cash Flow), la parte de la Aplicación o Usos de Recursos, requeriría (con el fin de evitar la "imposición" inmediata) de un Fuerte Recorte en diferentes rubros del Gastos Público (Pregunta hecha a los candidatos en el debate del 27 de Enero, 2014), gasto que es, evidentemente, monstruosos e inútil.

No obstante y sin perjuicio de lo anotado anteriormente, la realidad es que, el problema no son los impuestos, sino el uso (¿o, el mal uso?) que se hace de ellos. Porque cuando los impuestos son usados correctamente por los gobernantes, haciendo de ello una cultura, dos cosas ocurren: 1) Los ciudadanos "ofrendan" (pagan sus impuestos) con gusto, 2) Los impuestos tienen un efecto de retorno hacia el ciudadano que se materializa en una mejor calidad de vida.

Por no constituir este artículo un ensayo, sustento lo anterior con dos ejemplos:

1.- Infraestructura vial. Cuando lo correspondiente a infraestructura vial se invierte de manera correcta, los caminos, puentes y carreteras son de una calidad tal, que no solamente le facilitan a los ciudadanos la dinamización de su economía mediante el transporte de sus productos al mercado local o nacional y el acceso a sus trabajos en un transporte público de calidad, sin tener que gastar en combustible y sin correr el riesgo de llegar tarde y maltrechos a sus trabajos, sino que, además, cuando por su gusto el ciudadano sigue utilizando su transporte privado, el retorno económico se ve plasmado en la conservación de sus vehículos sin tener que incurrir en gastos constantes en el mantenimiento de los mismos, lo cual con caminos en pésimas condiciones, es caro y recurrente.
2.- Seguridad Social. Una adecuada inversión en Seguridad Social, evita que el ciudadano de escasos recursos, tanto de la clase media como de la clase pobre tenga que incurrir en gastos onerosos pagando medicina privada, incluso a profesionales que trabajan para la Seguridad Social pública, lo cual, es fácil entender, es un retorno de sus impuestos en servicios de calidad; le damos al gobierno y el gobierno nos lo devuelve, una vez realizado el proceso y rol que le corresponde constitucionalmente, sin pretender generar utilidades ni superávit, lo cual violaría aspectos de legalidad. La rentabilidad de los recursos que administra el Estado debe verse reflejada en la inversión social y en la calidad de vida de los ciudadanos: Salud, educación, infraestructura pública, etc.

Estos dos ejemplos sencillos a los cuales puede el lector sumarles, aquellos sobre los que haya reflexionado, nos permite entender que:

EL PROBLEMA NO SON LOS IMPUESTOS, SINO EL USO QUE SE HAGA DE ELLOS.

Es importante anotar que, cualquier candidato, de cualquier ideología política que ofrezca congelar la recaudación de impuestos "de por vida", o peor aún, quitarlos; no es digno de credibilidad; ningún país puede subsistir ni ha subsistido jamás, sin los impuestos de los ciudadanos.


El Candidato del PAC ha ofrecido públicamente no aumentar los impuestos durante los dos primeros años, y trabajar en el tema de la recaudación y el tema de la evasión; pero, más importante aún, en la buena administración e inversión de los impuestos actuales. Una visión de este tipo, enunciada con sinceridad por cualquier candidato a la Presidencia de la República, podría ser saludable para el país, en aras de recobrar la credibilidad en tema tan delicado, el tema del “bolsillo de los costarricenses”.